Hoy nos hemos levantado tarde.....muy tarde, ayer tuvimos cena de despedida y llegamos bastante tarde al apartamento.
Las vistas de Tokyo impresionantes y según iba oscureciendo mejor, ya que los barcos se iban iluminando e inundaban el agua de color.
Para despedirnos de Tokyo ya que hoy es nuestra última noche nos vamos a Shibuya, donde disfrutamos de la música de dos artistas, del ruido, el gentío, la luz y el color de un Tokyo inigualable con nada....por ahora.
Decidimos ir a Odaiba, una isla artificial que hay en la Bahía de Tokyo.
Odaiba fue construida en 1853 por el shogunato Tokugawa, y consistía en una serie de seis fortalezas destinadas a proteger Tokio de ataques vía marítima. En japonés, la palabra Daiba se refiere a las baterías de cañones colocadas en las fortalezas.
Odaiba fue replaneada como un área comercial y de entretenimiento, lo cual revitalizó a la isla. La apertura de hoteles y centros comerciales, fue seguida por la construcción de los estudios de televisión Fuji TV.
Para llegar a Odaiba se puede coger un ferry, ir en metro o en monorail. Nosotros al ser tan tarde optamos por ir en Metro, pero antes de llegar nos encontramos en la estación de Akihabara con la promoción electoral de algún candidato político de lo más surrealista, con manos gigantes amarillas y caretas del candidato.
Nosotros para no ser menos cogimos nuestra careta y a integrarnos...(espero que no sea corrupto ni nada parecido).
Al llegar a Odaiba nos fuimos a una de las playas que hay, pero en las cuales no recomiendan bañarse...(dios mío que habrá en el agua)Odaiba fue construida en 1853 por el shogunato Tokugawa, y consistía en una serie de seis fortalezas destinadas a proteger Tokio de ataques vía marítima. En japonés, la palabra Daiba se refiere a las baterías de cañones colocadas en las fortalezas.
Odaiba fue replaneada como un área comercial y de entretenimiento, lo cual revitalizó a la isla. La apertura de hoteles y centros comerciales, fue seguida por la construcción de los estudios de televisión Fuji TV.
Para llegar a Odaiba se puede coger un ferry, ir en metro o en monorail. Nosotros al ser tan tarde optamos por ir en Metro, pero antes de llegar nos encontramos en la estación de Akihabara con la promoción electoral de algún candidato político de lo más surrealista, con manos gigantes amarillas y caretas del candidato.
Nosotros para no ser menos cogimos nuestra careta y a integrarnos...(espero que no sea corrupto ni nada parecido).
Las vistas de Tokyo impresionantes y según iba oscureciendo mejor, ya que los barcos se iban iluminando e inundaban el agua de color.
Tras relajarnos en la orilla del ¿¿¿mar??? nos fuimos a la Noria Daikanransha, una de las más grandes en el mundo después de la London Eye.
Escogimos una cabina que es totalmente transparente (hasta el suelo) y desde la que tienes unas vista de Tokio impresionantes.
Todo luz y color, parece que estamos en el futuro, sólo faltan los coches voladores a nuestro alrededor.
Escogimos una cabina que es totalmente transparente (hasta el suelo) y desde la que tienes unas vista de Tokio impresionantes.
Todo luz y color, parece que estamos en el futuro, sólo faltan los coches voladores a nuestro alrededor.
Para despedirnos de Tokyo ya que hoy es nuestra última noche nos vamos a Shibuya, donde disfrutamos de la música de dos artistas, del ruido, el gentío, la luz y el color de un Tokyo inigualable con nada....por ahora.
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