viernes, 9 de julio de 2010

Lost in translation, día 9

Hoy es viernes y es día de compras.
Lo primero que hacemos es pasar por una tienda que tenemos al lado del apartamento y que está frente a la estación de Akihabara donde tengo que comprar un muñeco del juego Dragon Quest, que es como una cebolla azul y que sé que a mi amigo Jose le hace mucha ilusión.
Tras comprar la cebolla (conocida como Slime), y una camiseta de una marca conocida de Japón (buden akindo) seguimos nuestro camino y nos vamos a Asakusa, donde hay una calle entera con tiendas con souvenirs para turistas como nosotros.




En Asakusa, hacemos todas las compras, por lo que nos acercamos al templo, (esta vez juntos) para ver si saco el papel de la buena fortuna.
En este templo hay como escritorios con muchos cajones, y cada cajón con un número. Lo que tienes que hacer es coger la caja plateada y mientras la agitas pensar en el deseo que quieres mientras sale un palillo con uno de los números que aparece en los cajones.
De los cajones sacas el papel donde te dice si tienes muy buena, buena, regular, mala, pésima o fatal de la muerte fortuna....(por lo menos a mí me salió BAD FORTUNE)
En caso de que te salga el papel con la mala fortuna, lo tienes que dejar atado en los paneles con alambres para que los dioses se lleven ese mal rollo y todo en tú vida siga como está.
Si te sale buena fortuna pues te llevas el papel para casa.


Tras hacer las comprar, ir al templo y comer en un restaurante unos noodles buenísimos, volvimos al apartamento para descansar un poco ya que tenemos cena con los compañeros de Santi del trabajo (todos Australianos) en un Karaoke por la zona de Roppongi (barrio donde Tarantino rodó la escena de la pelea entre Uma y Lucy Liu).
En el Karaoke genial, el precio nos incluye 3 horas de karaoke con la cena de 7 platos (evidentemente abundantes no son), y todo lo que podamos beber..
Como no llevábamos la vergüenza en botes de 100ml la tuvimos que dejar en Madrid por lo que estuvimos las tres horas cantando, sin importar mi inglés, ni los gallos, ni la letras imposibles de cantar, en plan ABC de los Jackson Five...(ya sabéis, el alcohol distorsiona la realidad y yo me creía Beyoncé).


Volvemos al apartamento a las cinco, después de pasar por tres bares y terminar en una discoteca un poco rara y con muchas japos dispuesta a irse con el primero que pasara...(pero donde me metéis).

2 comentarios:

  1. Se te olvida mencionar que el juego de Dragon Quest, no es sólo un juego, es una auntentica religión en Japón!. El día que se estrenó Dragon Quest II (y va por el IX), se registró el mayor número de faltas a las escuelas y lugares de trabajo ya que supuso el comienzo del rol japonés o más bien conocido como JRPG. Por eso está estipulado que los Dragon Quest sólo pueden salir a la venta los fines de semana para no ocasionar estragos debido a las largas colas que se originan a la puerta de los comercios.
    Además, palabras que se usan en el juego, por ejemplo para recuperar salud, se usa hoy día en el lenguaje común para decir curar o aliviar a parte de muchas otras y se han incluido en el diccionario japonés por ser tan usadas, sobre todo entre los jóvenes.
    Ahí va una clase de historia japonesa a través de los videojugos.

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  2. Gracias Jose...
    Ahora entiendo que a las nueve de la mañana en los recreativos de Akihabara hubiera cola para entrar...esta gente son verdaderos adictos...
    Voy a tener que probar el juego para ver a la "cebolla" en acción.

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