Desde China con amor. Día 1

El viaje comenzó el 27 de octubre. Desde Madrid íbamos a Londres y en Londres nos esperaba el vuelo de British directo a Shanghai.
La duración del vuelo era de 10 horas, por lo que la hora estimada de llegada a Shanghai eran las 8 de la mañana del domingo 28 de Octubre.

El vuelo iba bien, hasta que la falta de sueño me produjo una de esas migrañas de "arráncame-la-cabeza" y sus consecuencias me hicieron protagonizar un momento "Aterriza como puedas", cuando en pleno aterrizaje me tuve que levantar al baño de lo mal que me encontraba.
Una vez que aterrizas y recoges las maletas tienes que ir al control de pasaportes, que en principio deberías pasarlo sin problemas. Te miran el visado te hacen una foto y "Welcome to China".

Lo primero que hicimos antes de coger el tren que conecta el aeropuerto con Shanghai fue sacar dinero en un cajero, ya que los yuanes sólo se pueden conseguir en China. Como nuestro banco sólo nos cobra 2€, sea la cantidad que sea, sacamos el máximo posible y rumbo al Maglev.
El Maglev es un tren de levitación magnética que te lleva desde el aeropuerto hasta la parada de metro Longyang Road ( linea 2 ). El tren alcanza una velocidad de 431km/h y un trayecto de 30 km lo hace en menos de 8 minutos. El precio es de 50 yuanes por persona (unos 6 euros).

Un vez que llegas a la parada de metro llega el momento de comprar los billetes. El metro de Shanghai va por zonas, por lo que cuanto más lejos vayas más pagas. Es más fácil hacerlo directamente en las máquinas ya que están en Inglés y no te ves en la situación de hacerte entender con el chino o china que haya en la taquilla.
El único problema que tuvimos es que no aceptaban billetes de 100 yuanes y tuvimos que buscar un sitio donde comprar algo (agua) y poder cambiar.
En torno a las 10 llegamos a nuestra parada, Yuyuan Garden, y tras un minuto andando a nuestro hotel, el SSAW Shanghai Hotel.
Al llegar antes de las 14:00 no sabíamos si íbamos a poder hacer el check-in, pero yo creo que al vernos la cara con la que llegamos se solidarizaron de nosotros y nos dieron sin problema la llave.
Tras una "siesta" de unas 3 horas nos fuimos a dar una vuelta para descubrir la ciudad.
Como lo teníamos al lado del hotel, nuestro primer destino fue la zona más tradicional de Shanghai, llena de pequeñas calles, con muchas tiendas, puestos, gente, motos, bicicletas...Un pequeño caos.

Lo primero que fuimos a ver fue el Yuyuan Garden, pero no lo encontramos y acabamos en el Yu Garden, un parque bastante bonito y muy tranquilo para lo que nos habíamos encontrado en las calles de alrededor.

En nuestra búsqueda del Yuyuan Garden, acabamos en "City God Temple", donde vi a una china que hablaba italiano y aproveché para preguntarle por los jardines de Yuyuan.

Finalmente, con su ayuda llegamos, pero era demasiado tarde y ya habían cerrado por lo que tendríamos que volver al día siguiente. Para coger fuerzas nos tomamos un café con una muffing mientras paseábamos por la zona del bazar.

Para cenar decidimos ir andando hasta la zona de la plaza del pueblo y recorrimos la calle Nanjing Rd, que es tipo Gran Vía de Madrid, toda llena de tiendas y centros comerciales.
Lo mejor, los grupos de gente bailando todos a la vez en mitad de la calle.

El pobre Rilakkuma se quedó con ganas de que me acercara, pero Mr.Grinch no me dejó... Snif Snif

Si recorres toda la calle llegas hasta la zona del río desde donde puedes ver una panorámica increíble de la zona financiera de Shanghai.

Tras hacernos unas cuantas fotos decidimos volver al hotel. Había sido un día muy largo y ya no sabía si era de día o de noche o si tenía hambre o sueño.