domingo, 4 de diciembre de 2011

Atenas, día 2

Hoy nos tocaba hacer de turistas en toda regla. Tras hablar anoche con unas de las chicas del hotel y con más indicaciones que nos habían dado desde Madrid, emprendemos la mañana, tomando rumbo a Syntagma. Tal y como dije ayer, se considera el centro de Atenas, y en ella encontramos el parlamento helénico y la tumba al soldado desconocido, esta última custodiada por la guarda nacional o évzoni, y que todos los días a las horas en punto realizan un cambio de guardia que atrae a multitud de turistas.
Los domingos a las 11:00, el cambio de guardia es con una banda de música. Nosotros por problemas logísticos no hemos llegado al que hacen en Syntagma, pero hemos visto el que hacen los guardias que están en la entrada del palacio presidencial, muy cerca de Syntagma, y al lado de los jardines nacionales.





Nuestra siguiente parada ha sido el estadio Panathinaikó también conocido como el Kallimarmaro (en griego καλλιμάρμαρο, es decir, el "mármol hermoso"), es un estadio de atletismo en Atenas, que acogió la primera edición de los Juegos Olímpicos Modernos en 1896 . Reconstruido a partir de los restos de un antiguo estadio griego, el Panathinaiko es el único estadio importante en el mundo construido enteramente de blanco mármol (del Monte Penteli) y uno de los estadios más antiguos del mundo. Me ha gustado mucho, primero por el estado de conservación y segundo porque estábamos solos, sin aglomeraciones ni colas que tener que esperar.


La que no podía faltar...




Después de llevarnos la medalla de oro, hemos ido al Templo de Zeus Olímpico, también conocido como «Olimpeion», que está situado a unos 500 metros al sureste de la Acrópolis.
En época helenística y romana fue el templo más grande del mundo conocido. Se construyó en mármol del monte Pentélico y medía 96 metros de largo y 40 metros de ancho. Constaba de 104 columnas de orden corintio, todas de 17 metros de alto. Actualmente se conservan 16 columnas de las cuales sólo 15 están en pie. La decimosexta fue derribada durante un temporal en 1852 y está todavía tumbada donde cayó.




Y finalmente, la joya de la corona: la Acrópolis.
La Acrópolis era, literalmente, la ciudad alta y estaba presente en la mayoría de las ciudades griegas, con una doble función: defensiva y como sede de los principales lugares de culto. La de Atenas está situada sobre una cima, que se alza 156 metros sobre el nivel de Atenas. También es conocida como Cecropia en honor del legendario hombre-serpiente, Cécrope, el primer rey ateniense.

La entrada a la Acrópolis se realiza por una gran puerta llamada los Propileos. A su lado derecho y frontal se encuentra el Templo de Atenea Niké.



A la derecha de donde se erigía una estatua de Atenea realizada por Fidias se encuentra el Partenón o Templo de Atenea Partenos (la Virgen).



A la izquierda y al final de la Acrópolis está el Erecteión, con su célebre stoa o tribuna sostenida por seis cariátides.



En la ladera sur de la Acrópolis se encuentran los restos de otros edificios entre los que destaca un teatro al aire libre llamado Teatro de Dioniso, donde estrenaron sus obras Sófocles, Aristófanes y Esquilo. La mayoría de los grandes templos fueron reconstruidos bajo el liderazgo de Pericles durante la Edad Dorada de Atenas (460-430 a. C.). Durante el siglo V a. C., la Acrópolis adoptó su forma definitiva.



Os dejo un enlace por si os interesa saber más sobre la Acrópolis de Atenas.
Mañana visitaremos el museo de la acrópolis, el ágora y subiremos a una de las colinas más alta de Atenas.

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